Hacia finales del siglo XI una pastorcilla
encontró milagrosamente cerca de los confines de Portugal, el cuerpo de una
Santa Eufemia, que fue colocado bajo el altar de una iglesia dedicada a Santa
Marina. Algunos
años más tarde, por orden del Obispo Pedro Seguin (1157-1169) los restos se
trasladaron a la Catedral de Orense, en España. El obispo sucesor de Seguin
promovió el culto de la Santa. Eufemia se hizo famosa
por las curaciones operadas por su intercesión, conocidas por los escritos del
obispo Alfonso (1174-1213). El 23 de junio de 1720, el obispo Juan Muñoz
de la Cueva, colocó el cuerpo de modo solemne junto a las de los mártires
Facundo y Primitivo.
El culto de la santa, está muy extendido en
la diócesis de Tuy, al lado de la de Orens. En el
siglo XVI varios hagiógrafos españoles, escribieron una vida de la santa,
tratando de identificarla con Eufemia de Calcedonia. Está de más decir, que esa
biografía no tiene ningún fundamento.